Mis más sinceros saludos
Espero que estés bien hoy.
Me llamo Kerstin Koplin, tengo 64 años y soy de origen hispano-alemán.
Les escribo hoy porque mi salud empeora cada día que pasa.
Soy una de esas personas con las que la naturaleza ha sido muy generosa.
Dios, en su infinita bondad, me ha bendecido a lo largo de mi corta vida.
Por desgracia, ya no tengo familia y nunca tuve la oportunidad de tener un hijo que me sucediera, pero he llevado una vida relativamente feliz.
Hasta ahora, he compensado este vacío en mi vida intentando ayudar a las personas necesitadas en la medida de lo posible, ofreciéndoles aunque sea un momento de felicidad.
Por desgracia, desde hace varios años padezco una grave enfermedad, sin esperanza de mejora, que me impide literalmente continuar con mi labor caritativa.
Sólo por eso me he tomado la libertad de dirigirme a vosotros con este mensaje para pediros ayuda para continuar mi última buena obra humanitaria antes de dejar este mundo.
No conozco su campo de actividad y menos aún su situación personal, pero con su permiso, me gustaría legarle la considerable suma de (258.000 euros) que tengo depositada en un banco de un país de la Unión Europea, donde vivo y trabajo desde hace varios años.
Simplemente pido que una parte de esta suma se utilice para fines benéficos en algunas iglesias y para proporcionar alguna ayuda a las personas necesitadas de su entorno.
La segunda parte será legalmente para ti por aceptar ayudarme a hacer esta última buena acción.
No te sorprendas de haber sido elegido entre tanta gente, con la ayuda de Dios, fui guiado hasta ti y estoy seguro de que eres la persona que necesitaba para beneficiarme de este regalo.
Tienes mucha suerte, así que nunca dejes pasar una oportunidad como ésta que podría cambiar tu vida radicalmente.
Admito sinceramente que mi enfoque es inusual, pero les pido que crean en mi buena fe, que hagan un esfuerzo sincero por creer.
Creo de todo corazón que no me he equivocado al elegirte para esta importante misión, creo en Dios y él me manda confiar en ti.
Si está interesado en mi propuesta, le ruego que me confirme su aceptación para que pueda ponerle en contacto con mi notario que le ayudará con los trámites administrativos para hacerse legalmente con los fondos con total transparencia y seguridad.
El notario Pérez sigue siendo mi única persona de confianza, por lo que no debe preocuparse cuando esté en contacto con él.
Por favor, responda directamente a mi correo electrónico privado: krstnkoplin@hotmail.com
Le pido a Dios, el Eterno, en toda su gloria y bondad, que te traiga alegría y felicidad en tu vida.
Le pido sinceramente que trate este mensaje con la máxima discreción. Le recuerdo que se trata de una suma muy elevada.
Por su propia seguridad, le rogamos que mantenga esta información lo más confidencial posible.
Kerstin Koplin
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